Es temporada de estrenos en Netflix y "Flaked" es una de las novedades del servicio de streamig.
Esta serie de 8 capítulos está protagonizada por Will Arnett, un actor conocido por ser la voz de Batman en la película de Lego, pero mucho antes por su participación en la serie Arrested Development y muchas películas cómicas.
Flaked no es propiamente dicha una comedia, puesto que integra muchos elementos del drama. El personaje principal, Chip (interpretado por Arnett) es un ¿ex? alcohólico con pasado trágico que da clases de autosuperación en un centro comunitario de Venice, California. Fabrica muebles, y se traslada de aquí para allá en una bicicleta que tiene un cajón por delante del manubrio.
Su socio y mejor amigo se llama Dennis (interpretado por David Sullivan, quien para los freakis es uno de los protagonistas de Pramer), un tipo que tiene dos perros y anda por ahí en una patineta larga pero no es un skater.
Desde el primer capítulo aparece un tercer personaje que se llama Londres (ups, como suena esa traducción forzada de London), que interpreta Ruth Kearney. Los tres conformarán un triángulo amoroso bastante peculiar.
Hay pocas tetas, pocas drogas, algo de alcohol y una impresionantemente baja de delitos. En Venice la gente deja los negocios abiertos por la noche y nadie roba nada. Se deja la bicicleta o la patineta sin seguridad por largo rato, y nadie se las lleva.
Lo interesante del personaje principal, Chip, es que existe una evidente contradicción entre lo que predica y lo que vive. Tiene problemas mayúsculos y le cuesta pedir ayuda. Sin embargo, a los cuarenta y tanto, se las arregla, más o menos bien, para vivir con la mentira.
Y sí, la mentira termina siendo el gran tema de Flaked y es tal vez lo que más se tendría que haber explotado. Hay una mentira que se expande entre los personajes y otra que va hacia el público.
Chip es un personaje muy potente, con muchas posibilidades que se va enfrentando a distintos conflictos que arrancan con enamorarse de la misma mujer que su amigo y estar al borde de que el dueño venda el edificio donde está su taller. Estoy seguro de que si Chip hubiera sido encarnado por Bradley Cooper, se estaría pidiendo un premio, pero como se trata de Arnett, se solicitan más pergaminos.
A lo largo de los 8 capítulos hay muchas situaciones graciosas, una muy buena banda de sonido y una entrañable fotografía. También se encuentran otras historias que siguen girando en torno a la relación de amistad que une a Chip y a Dennis y la presencia de Londres.
También hay personajes secundarios que van articulando la acción como un peculiar artista de stand up, una ex alumna de Chip que se convirtió en su amante, y un policía al que le gustan las bromas pesadas.
¿Conocidos que aparecen? Mark Boone Junior (hombre de Sons of Anarchy); Heather Graham (¿Qué decir de ella?); Christopher Mintz-Plasse (el villano de Kiss Ass); y Kristie Alley (uno se siente viejo al hacer la referencia a Mira quién habla, pero es así).
Esta temporada de Flaked termina con un signo de interrogación, cerrando muchas de las historias, pero dejando abiertas otras para lo que se supone que será la segunda. Obviamente, eso dependerá de Netflix.
Dato; Chip no usa celular, pero cuando le obsequian un smartphone, es un equipo con Windows Phone.
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